Cartas de lectores

Cartas de lectores Caso Marchese

Respecto de la carta del ministro Jiménez (23/02): 1) es absurdo lo que plantea sobre acusar a LA GACETA de "instalar una tribuna para condenar a su hijo". El diario sólo cumplió con el deber de información, esencia de su función social. 2) El hijo del ministro circulaba a 70/80 km "oficialmente" en una avenida donde la velocidad máxima es de 60 km. Esto no es un accidente, es una violación a las normas, con dos muertos como consecuencia. 3) El ministro dice que se acuesta con "dos muertos en su pensamiento"; los otros tienen el pensamiento y el corazón destruido por dos ausencias. 4) El ministro dice "no pido nada, si ya he perdido todo en este desgraciado asunto". ¿Qué perdió? ¿Honorabilidad en el barrio? ¿lo miran mal cuando entra a su trabajo? 5) El ministro está "atormentado por el sesgo de la mediatización". Me parece que el ministro ostenta una banalización espiritual, cuando lo que debe importar es el dolor de las víctimas. Finalmente, si el ministro hubiese hecho gala de su deber moral y social, como ciudadano que circunstancialmente ocupa un cargo público, hubiese llevado a su hijo a Tribunales, para que lo juzguen y se sepa la verdad, y con seguridad, LA GACETA hubiera "mediatizado" su conducta ejemplar, como padre y ciudadano comprometido; pero el ministro nos muestra una carta, intentando colocarse en el rol de víctima, después de que fracasó la prescripción del caso. Ministro, a veces es mejor guardar silencio respetuoso cuando se es deudor moral, y no escribir cosas que, lejos de mejorar su imagen social, la empeoran. Espero que reflexione, y sólo logrará la paz que desea cuando enfrente la verdad en el ámbito de la Justicia.

Ricardo Riva Roy
Muñecas 1.420
San Miguel de Tucumán

Pensión por discapacidad

Necesito hacer público mi reclamo. Tengo una hija de cuatro años que tiene discapacidad motriz. En abril de 2010 inicié el trámite por una pensión que hasta el día de hoy, dos años después, aún no puedo obtener. La poca información que me dan es que la carpeta ingresó con un sello trucho. Pregunto si es necesario que vean a mi bebé para que se cuenta de que aquí no hay nada trucho, que ella tiene el derecho de recibir una ayuda y se la están negando. Yo no mentí, hice las cosas como tenían que ser y me fue mal. Le entregué en mano la carpeta a una licenciada de la Municipalidad de Yerba Buena; ella y la gente que atiende en la central de Crisóstomo Alvarez y avenida Alem se tapan entre sí y siempre dicen lo mismo: que la carpeta está en centro de carga. ¿Hasta cuándo? Se están riendo en mi cara.

Noelia Marina Alarcón
Frías Silva 210
San José-Tucumán

Constancia policial

El 3 de febrero, mis hijas fueron a la comisaría de El Colmenar a solicitar una constancia de autorización para llevar unos días de vacaciones a mis nietas. En dicha dependencia las atendió una suboficial encargada de expedientes. Les cobró $ 50 por ambas constancias. Cuando mis hijas me contaron lo sucedido, me dirigí a la comisaría y pedí hablar con la suboficial, quien me manifestó que el jefe de la comisaría ordenó que les cobraran ese monto. Pedí hablar con él para que me diera una explicación. Me respondió que nos habían hecho un favor al confeccionar las constancias y que si no estaba de acuerdo con lo abonado, las devolviera y me devolverían el dinero. Indignado por esta situación, le contesté que es una obligación suya atender a los vecinos; que ese era su trabajo, sin la obligación de favores a cobrar. Como no le gustó mi respuesta, me pidió que me retirara de la delegación. Pregunto: ¿adónde fue a parar el dinero que abonamos?

José Raúl Rivadeneira
Manzana A Lote 6 Barrio Nueva Esperanza
Las Talitas-Tucumán

La esquina del desmadre

Coincidimos totalmente con la carta del lector Mellace (04/03) sobre el descontrol de avenida Roca y Entre Ríos. A lo expresado, debemos sumarle que nuestras veredas son usadas como baños públicos, pistas de baile, bar al aire libre en la que se consumen todo tipo de sustancias. Los que salimos a la madrugada a trabajar encontramos asquerosos regalitos en nuestras puertas (desde olores nauseabundos por necesidades básicas, envases de todo tipo de bebidas alcohólicas, jeringas y preservativos usados); los taxis no quieren entrar en la cuadra por temor y qué decir de las peleas y tiroteos. No dormimos cuatro días a la semana, ya que la "fiesta" comienza el jueves. Las autoridades del Ipla, la Dipsa y el Ministerio de (In) Seguridad, ¿donde están? ¿No se enteraron de todos los trámites que hicieron los vecinos? ¿Y la "ley" que prohíbe la venta de alcohol a partir de las 23 hs, para quién se hizo? ¿Para los menores o para los inescrupulosos que venden? Tenemos derechos que no se están respetando y las autoridades hacen oídos sordos mientras crece la inseguridad. Instalen cámaras en esa esquina, den soluciones. ¡Esto es intolerable!

María Roig
mononaroig@gmail.com

"Los ojos del Gobernador"

¿Cuál es el funcionario público que recorre y ve con "los ojos del gobernador" el barrio El Palomar, de Banda del Río Salí? Porque no ve bien ni escucha a jóvenes motociclistas que circulan a gran velocidad generando ruidos ensordecedores, sin cascos y practicando "Willy" de a dos, poniendo en peligro a peatones y a vehículos que transitan por sus calles, carentes de obras preventivas de accidentes y de señalización vial. Los que trabajamos necesitamos descansar bien. No debemos depender de personas que no son controladas por sus padres, quienes no les enseñan a manejarse responsablemente en los espacios públicos. En otras provincias se aplican ejemplares multas a tiransgresores de normas viales que dieron buenos resultados y que modificaron comportamientos antisociales. Se nota que nuestro representante tampoco recorre el barrio porque hay vecinos que padecen enfermedades crónicas, con tratamiento en sus propias viviendas y que, además, respiran olores nauseabundos causados por estancamiento de aguas en cordones cuneta y basurales a cielo abierto. Gestionar y administrar instituciones públicas es buscar el bienestar de toda la comunidad, cumpliendo eficaz y lealmente con la función inherente al cargo. ¿De qué manera? Trabajando.

Alberto Lizardo Ponce
Bolivia y México
Banda del Río Salí-Tucumán

Ruta Hualinchay-Colalao (I)

Reconozco públicamente que nunca estuve de acuerdo con la política educativa de este Gobierno porque dista mucho de lo ideal. Pero mis críticas siempre han sido constructivas. La ruta a los Valles, Hualinchay-Colalao del Valle, es la medida más trascendente que tomó el gobernador en los últimos años. No sólo traerá enormes beneficios para toda la región del NOA, sino, como dijo el lector Héctor Bravo, combatirá la incomunicación entre los pueblos en zonas de una belleza increíble, donde viven muy pocos habitantes que tienen muy pocos servicios y que los hace abandonar estos lugares. En Hualinchay, la gente lo único que tiene es una escuela y un CAPS; yo fui testigo de que muchos emigraron, hartos de esperar que llegue el progreso. Con esta ruta muchos volverán.

Luis María Andrada
Ex director de Escuela 358 de Hualinchay

Ruta Hualinchay-Colalao (II)

El proyecto del camino Hualinchay-Colalao del Valle, aprobado por el Gobierno, es una excelente alternativa; pero "quien puede lo más puede lo menos". ¿Por qué no se agrega en esa obra un ducto (cañería de gas natural) desde La Candelaria (planta presurizadora TGN) hasta Colalao del Valle? Lo más caro de un gasoducto es la traza o pista y esta ya está realizada, o se hará con el camino a concluir. Llegar con gas natural a la cabecera del ducto en Colalao del Valle significaría que Salta lo extendería hasta Cafayate, Catamarca a Santa María y Tucumán a Amaicha, Tafí del Valle y El Mollar. Una obra que nuclearía el esfuerzo de tres provincias colidantes. Los beneficios significarían hospitales, escuelas, hoteles, viviendas, estaciones de servicio con gas (GNC); y si agregamos radicación de industrias y/o emprendimientos que generen empleos, con 20 años de eximición impositiva por radicarse en los Valles, se evitaría el éxodo y el desarraigo familiar de la juventud en busca de un futuro laboral.

Héctor E. Chrestia
Martín Fierro 555
Yerba Buena, Tucumán

La Presidenta y los maestros

Una verdad a medias siempre está rodeada de mentiras. El daño que la Presidenta ha infligido a los maestros es irreparable. No sólo los suyos la vivaron; hasta los opositores se callaron. Le puso nombre y apellido a una leyenda que instalada en el imaginario colectivo, sólo sirve para despreciar a los maestros. Cuando Yavé se propuso destruir Sodoma y Gomorra por "las quejas enormes" contra ellos, primero se aseguró del rumor. No obstante, Abraham interpeló al Señor en nombre de los justos que pudieran encontrarse entre los malvados, en la seguridad de que un juez justo como Dios, no permitiría que el bueno sea tratado como el malo. A 40 millones de argentinos se les ocultó por ejemplo que los maestros concurren hasta el 30 de diciembre y se reintegran alrededor de la primera semana de febrero; que cumplen cuatro horas frente a los niños y los custodian a la entrada y a la salida hasta que retiran al último alumno (a veces hasta más de una hora); que en su hogar, los "buenos y justos maestros", preparan sus carpetas didácticas, láminas, carteleras y toda clase de material que necesitan para trabajar con los niños; que a falta de personal, maestros y directores limpian y cocinan cuando no hay quien lo haga; que dan abrigo a los que tienen frío; que quizás no salen a pasear con sus propios hijos pero sí llevan a ajenos para darles una oportunidad; que asisten a reuniones y capacitaciones fuera de servicio y a todo acto protocolar que necesita mostrar a la educación. No se puede tapar el sol con la mano. Hace algún tiempo, una dirigente gremial le contestó a un crítico de la docencia "que el ladrón cree que todos son de su condición". En todo caso lo que ha permitido y permite la impunidad de los malos maestros, políticos, funcionarios, empresarios, empleados, etcétera, no es la falta de leyes, sino la ausencia de su aplicación.

Susana Cristina Díaz
Frías Silva 274
San Miguel de Tucumán

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